Durante su estancia en Nueva York se adhirió a las teorías de Henry George un pensador socialista norteamericano que proponía entre la implementación de un impuesto único que gravara solo la tenencia de la tierra. Asistió al Congreso del Impuesto Único en Niágara del 19 al 21 de agosto 1916, posteriormente tradujo el libro Extractos de Progreso y Miseria de Henry George y fue editor de la revista Revisión órgano de difusión de la Unión Georgista en México. Finalmente fue invitado a dar una conferencia en el Congreso Georgista en San Francisco, donde expuso el desastre del agrarismo en México.